¡Hola! ¿Cómo estáis?
Hoy os traigo un post sobre mi viaje del fin de semana pasado a Praga, del 2 al 4 de diciembre. Praga era un destino que quería visitar sí o sí, ya que está cerca de Budapest y de hecho era mi segunda opción como destino Erasmus. Esperamos a visitar Praga en estas fechas para poder ver el mercado navideño, considerado como uno de los mejores de Europa. Como persona a la que no le gusta la Navidad, he de decir que al menos este finde me encantó 😂 Estaba todo decorado precioso y justo la tarde-noche del primer día que llegamos nevó, lo cual hacía que todo estuviera aún más bonito. Hacía muchiiiiísimo frío y muchísima gente, eso sí, pero repetiría este viaje sin dudarlo. Os paso a enseñar todo lo que vimos.

La plaza principal de Praga y donde se encontraba el mercado navideño. Como os he comentado, estaba todo increíblemente bien decorado y por la noche con todo iluminado no podía haber un ambiente más navideño. 

El Reloj Astronómico situado en la fachada del Antiguo Ayuntamiento es también uno de los imprescindibles en Praga. A cada hora en punto desfilan las figuras de los doce apóstoles junto con las del Turco, la Avaricia, la Vanidad y la Muerte. Cada hora se concentra muchísima gente en la plaza para verlo, ya que es algo que hay que ver sí o sí. 

Junto con la Plaza, otro de los puntos que más me gustaron de la ciudad fue el Puente de Carlos. Desde él se conectan las dos partes de Praga, la Ciudad Vieja y la Ciudad Pequeña. Es un puente medieval del siglo XIV y destaca por las 30 estatuas que tiene en los laterales, 15 en cada lado. Cruzarlo dando un paseo es muy bonito pero es verdad que hay muchísima gente cruzándolo, por lo que hay x horas del día en las que es misión casi imposible.

Hicimos un free tour en el que una de las paradas fue el Barrio Judío. En este punto no puedo ser objetiva, ya que en Budapest el Barrio Judío tiene sinagogas preciosas que comparadas con las de Praga no tenían punto de comparación. Sin embargo sí que merece la pena dar una vuelta por esas calles, ya que hay un total de 6 sinagogas. 

Subimos al castillo andando (hay bastantes escaleras) para ver las vistas de Praga desde arriba y en nuestro caso fue un poco una pena, ya que había bastante niebla y no se apreciaban muy bien las vistas. 

Otro punto curioso en Praga es este muro sobre John Lennon, lleno de grafitis y donde las fotos quedaban muuuy guays.

Este edificio construido a finales de los 90 por Frank Gehry también es un punto imprescindible en Praga y la verdad es que nos gustó bastante, ya que es muy diferente a todos los edificios que tiene alrededor y es muy original.

También como punto muy original de la ciudad está este monumento representando la cabeza de Kafka, que está en continuo movimiento. 

Praga es el lugar del mundo donde más cerveza se consume, por lo que no podíamos irnos sin probarla. Probamos la Pilsner, la más famosa de Praga y personalmente me gustó bastante. Aunque está bastante fuerte comparada con cualquier otra cerveza, está buenísima y no es excesivamente cara.

Quisimos probar algún plato típico y en mi caso elegí un plato llamado pečená krkoviče, el cual era cuello de cerdo con col y esta especie de albóndigas de pan prensado, las cuales añaden a muchos de sus platos. Personalmente me gustó bastante y sin duda repetiría 😋

Por último, os dejo con un mix de fotos que fui haciendo esos días por la ciudad.

¿Qué os ha parecido el post de hoy? ¿Habéis visitado Praga? ¡Os leo en comentarios!

Feliz domingo 💘