¡HOOOLA! Después de una semana desaparecida...estoy de vuelta 💃

El motivo de mi desaparición ha sido que he tenido vacaciones y las he aprovechado para hacer lo que más me gusta: viajar. Estaba pensando en si hacer o no este recap del viaje por el blog y finalmente he decidido que sí, ya que me recuerda a los posts #ErasmusLife que hacía durante mi Erasmus y que recuerdo con tanto cariño. Mi viaje con amigas empezó el jueves 22 con un vuelo a Bruselas que permitía aprovechar todo ese día y estando allí hasta el domingo 25. El viaje lo dividimos de la siguiente manera: el primer día en Bruselas, el segundo en Brujas, el tercero en Gante y el último e Bruselas, hasta la hora del vuelo que era por la tarde. En el post de hoy os hablaré de Bruselas y, en los próximos, de Brujas y Gante.

Empezamos el día con un free tour que salía desde la plaza central de la ciudad, donde se encuentra el ayuntamiento rodeado de edificios muy característicos con detalles en dorado. La plaza es muy, muy bonita, siempre está muy concurrida y es sin duda una parada obligatoria.

Llegamos andando hasta estas galerías, donde están ubicadas muchas tiendas de lujo y algunas chocolaterías. Son cubiertas, por lo que si os pilla la lluvia (como nos pasó), es un buen sitio para resguardarse.

Cerca tanto de la plaza como de las galerías se encuentra este niño, una de las figuras más emblemáticas de la ciudad. Es pequeñito pero monísimo y además a su alrededor hay un montón de tiendas de souvenirs, chocolaterías y gofrerías. También podéis visitar Jeanneke Pis, la "hermana" del Manneken Pis, muy parecida pero en niña.

Este también es un punto interesante porque se puede subir gratuitamente a la terraza, desde donde se ven las vistas de la ciudad. 

Su catedral es de estilo gótico (mi preferido) por lo que me pareció muy bonita. Está llena de detalles y sin duda merece la pena hacer una parada en este punto.

Reservamos de forma gratuita la visita a ambos sitios y nos resultó muy interesante. Es una visita que en mi opinión vale la pena, tanto por ver por dentro el Parlamento Europeo como por el museo interactivo al que se puede acceder. Es importante reservar con tiempo y sobre todo llegar a la hora, ya que son visitas programadas y con aforo limitado.

Al Atomium fuimos el último día, ya que está un poco alejado del centro y hay que llegar con metro. Fue un momento del viaje que me encantó, ya que se pueden hacer fotos muuuy divertidas y el monumento en sí también me parece muy curioso de ver. Se puede visitar por dentro aunque nosotras no lo hicimos.

También visitamos otros sitios como Delirium (uno de los bares más famosos de Bruselas, donde la cerveza es un must), el Palacio de la Bolsa o el Jardín Mont des Arts, pero se me pasó hacerles foto 😅

Sin duda Bruselas es un destino que me encantó, donde me lo pasé muy, muy bien y que recomendaría al 100%. Como el único punto más negativo, diría que son los precios, ya que todo es bastante caro pero era algo con lo que ya contábamos. De todas maneras y como en casi cualquier destino, siempre hay opciones económicas y que más ahora con TikTok, Instagram y de más son muy fáciles de encontrar.

En el próximo post os enseñaré el resto del viaje. ¿Habéis visitado Bruselas? Os leo 💭

Espero que os haya gustado el post tanto como a mí hacerlo, ya que como os digo me ha recordado a mi época Erasmus donde pasé por unos meses a contaros mi vida frenética y llena de viajes jajaj 💘

Feliz domingo