¡Hola a tod@s y feliz año! Espero que hayáis empezado 2023 de la mejor forma posible y que podáis cumplir todo aquello que os hayáis propuesto 💕

Empiezo el primer post de este año en miércoles (volveré a publicar solo los domingos a partir del próximo post) para hablaros del primer destino que visitamos en nuestro último viaje Erasmus de 2022, del 17 al 19 de diciembre; Copenhague. Tenía muchísimas ganas de visitar la capital danesa porque después de visitar por primera vez un país nórdico en octubre, Suecia, corroboré lo mucho que me llama la atención este tipo de estilo de vida. En mi opinión, los países nórdicos es de lo más diferente que se puede ver dentro de Europa, ya que creo que se respira un ambiente mucho más tranquilo que en cualquier otra capital europea. Es evidente que en gran parte se debe al elevadísimo poder adquisitivo del país, pero eso también ayuda a que las ciudades estén increíblemente cuidadas al detalle. Aunque hacía muchíiiiisimo frío, eso no impidió que disfrutáramos del turismo, así que paso a enseñaros todo lo que visitamos. 

Una de nuestras primeras paradas fue en este castillo del siglo XVII, el cual fue residencia de verano del monarca Christian IV. Sus jardines nevados estaban absolutamente preciosos y las vistas ya hicieron que nos fuéramos enamorando de la ciudad.

Sin duda uno de los atractivos turísticos más famosos de Copenhague es este canal con los edificios de colores a ambos lados. Tanto de día como de noche es una zona muy bonita para pasear, y además en estas fechas se podía disfrutar de un mercado navideño lleno de paradas con todo tipo de productos.

Aunque es algo que hay que ver sí o sí, nos decepcionó bastante 😂 Hicimos un free tour en el que nos dijeron posteriormente que era uno de los monumentos que entraban en la lista de los más decepcionantes y...totalmente. Está bastante alejada del centro andando, de noche no está iluminada y es bastante pequeña. Aún así, no podíamos irnos de Copenhague sin visitarla.

Esta calle es la calle peatonal más larga de Europa y pasear por ella era muy entretenido, además de estar iluminada en estas fechas navideñas. Está llena de tiendas a ambos lados; todas las tiendas Inditex, marcas de lujo, souvenirs y la Lego Store, muy famosa debido a que la marca es danesa. 

Este palacio es la residencia oficial de la monarquía danesa y lo más curioso de ver es que no es un único edificio, sino que son 4 en total, todos juntos en una especie de plaza circular. En cada uno de ellos viven determinados miembros de la monarquía y no es como en otros países en los que los castillos están rodeados por vallas o por alguna limitación que impida verlos de cerca, si no que de alguna manera están "abiertos" a cualquiera que quiera pasear cerca de ellos.

También conocida como la Iglesia de Mármol, está situada al fondo del Palacio de Amalienborg. Es un templo luterano de estilo rococó al cual se puede entrar de forma gratuita y que merece mucho la pena.

Al final de la calle Stroget se encuentra esta plaza, presidida por el ayuntamiento de la ciudad y en la que ahora se podían ver también algunos puestos navideños.

Aunque no entramos porque era bastante caro, desde fuera se puede ver parte de este parque de atracciones, muy famoso también en la ciudad.

Todo en Copenhague es excesivamente caro, pero no queríamos irnos sin probar algo típico. Nos recomendaron este buffet, Dalle Valle, con un precio de unos 14€ (sin bebida, ya que ahí es donde aprovechan para encarecer muchísimo el precio) donde se podía comer tanto comida danesa como la típica comida que hay en cualquier buffet. Estaba todo absolutamente INCREÍBLE y sin duda recordamos Copenhague en parte por lo mucho que disfrutamos comiendo aquí.

Por último, os dejo con un recopilatorio de algunas fotos que fui haciendo por la ciudad.

¿Qué os ha parecido el post de hoy? ¿Habéis visitado Copenhague? ¡Os leo en comentarios!

Yo sin duda lo recomiendo al 100% y me atrevería a decir que, junto con Estocolmo, ha sido una de las ciudades que más me han gustado este Erasmus.

Feliz día 💚